De acuerdo con la Ley de Migración Brasileña (Ley nº 13.445/2017) y su normativa reglamentaria, el plazo de 4 años requerido para solicitar la naturalización ordinaria comienza a contarse a partir de la concesión de la residencia por tiempo indeterminado, y no desde el momento en que la persona ingresa a Brasil.
Esto significa que el tiempo previo, como la estancia inicial con visa temporal o sin regularizar, no se contabiliza para este fin. Solo una vez que el migrante obtiene la residencia permanente (por tiempo indeterminado) es que empieza a correr el período exigido para la naturalización.Reducción del plazo para ciertos casos
Sin embargo, la ley también contempla situaciones especiales en las que el plazo de 4 años se reduce a solo 1 año, siempre que el solicitante cumpla con uno de los siguientes criterios:
1. Tener un hijo nacido en Brasil: Este vínculo familiar con un brasileño nato demuestra una integración significativa con la sociedad brasileña.
2. Contraer matrimonio con un ciudadano brasileño nato: En este caso, se requiere además que el matrimonio sea válido y que la convivencia no se haya interrumpido.
Estos casos reflejan el interés del legislador en facilitar la integración de migrantes que ya tienen lazos familiares directos con ciudadanos brasileños.
Ejemplo práctico
• Si un migrante llegó a Brasil en enero de 2020, obtuvo la residencia por tiempo indeterminado en marzo de 2022 y tiene un hijo nacido en Brasil en junio de 2023, podrá solicitar la naturalización a partir de junio de 2024, es decir, solo 1 año después del nacimiento de su hijo.
• De manera similar, si contrajo matrimonio con un brasileño nato en abril de 2023, el plazo también será reducido a 1 año desde esa fecha.
Esta reducción de tiempo subraya el reconocimiento de Brasil hacia los vínculos familiares como un factor clave para la adquisición de la ciudadanía, promoviendo la integración de los migrantes a la sociedad brasileña de manera más ágil y efectiva.
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